La Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) de Chile ha hecho público un informe en el que revela los principales destinos de su producciones al termino del primer semestre del año 2019 y una dato salta a la vista: Cuba es el tercer país que mayor cantidad de carne de res compra en este […]
La Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (Odepa) de Chile ha hecho público un informe en el que revela los principales destinos de su producciones al termino del primer semestre del año 2019 y una dato salta a la vista: Cuba es el tercer país que mayor cantidad de carne de res compra en este país en lo que va de año.
El informe precisa que el gobierno cubano empleó cerca de dos millones de dólares aprovisionándose de “carne roja”, una cifra que representa el 6% de las ventas chilenas en este sector, el cual se encuentra liderado por China con un 71% y seguido por Canadá con un 8%.
A inicios del pasado mes de junio se informaba que, como parte de un convenio con Bolivia, Cuba estaría importando carne de res, leche en polvo y pollo a la Isla.
En aquel momento se dio a conocer un comunicado en los medios nacionales cubanos que informaba que una delegación de Bolivia había concretado la exportación de leche en polvo, pollo y carne de res al mercado de la nación caribeña.
Si embargo, todas estas importaciones no representan una mejoría alimenticia en el cubano de a pie, el cual tiene “prohibido” alimentarse con carne de res, ya que esta solamente se otorga a las dietas médicas o se comercializa en las tiendas recaudadoras de divisas a un precio aproximado de 23 CUC el kilo, lo cual se encuentra muy por encima de las posibilidades de quienes viven de un salario en la Isla.
La carne que es comprada fuera de Cuba tiene como destino final el abastecer al sector del turismo en todas sus aristas, haciendo que sea imposible para los cubanos el beneficiarse de este tipo de importaciones y que tengan que apretarse los cinturones para poder llevarse a la boca un trozo de esta carne o simplemente recurrir a los escurridizos matarifes o revendedores del mercado negro, quienes desafiando a las autoridades y a la posible condena que le puede caer encima por el delito de hurto y sacrificio de ganado mayor, venden la preciada carne a 2.50 CUC la libra.