¡Assalam Alaikum!
Quien haya tenido la oportunidad de viajar por Marruecos ya conocerá estos pastelitos tradicionales, ya que son los típicos dulces que se sirven con el té. Literalmente “harcha” significa “áspera” por el tacto granuloso que tiene, pero que esto no os desanime… ¡están buenísimas!
Esta receta la he sacado de un librito de pastelería marroquí y la verdad que las cantidades son perfectas. Además, salen los pastelitos justos para acabarlos en un mismo día y que no sobren.
Ingredientes:
– 250 g de sémola de trigo duro fina (podéis encontrarla en carnicerías árabes o en Mercadona, de la marca “Nomen”) + un poco más para espolvorear
– 100 g de mantequilla
– 2 cucharadas de azúcar
– 10 g. de azúcar vainillado
– 125 ml de leche
– 1/2 sobre de levadura en polvo (7g.)
– Una pizca de sal
Preparación:
- En un recipiente mezclamos la sémola, la sal, el azúcar, la levadura química y el azúcar vainillado.
- Derretimos la mantequilla y la añadimos a la mezcla, mezclando con las manos hasta obtener una masa con una textura tipo arena.
- Echamos la leche y mezclamos todo bien. Dejamos reposar en el frigo de 20 a 30 minutos.
- Calentamos una sartén SIN aceite, espolvoreamos sobre ella sémola fina y ponemos dos o tres moldes redondos encima. Dentro del molde, rellenamos con la cantidad de masa necesaria y espolvoreamos la cara superior. Aplastamos para que la masa coja la forma del molde.
- Freímos los pasteles por ambos lados, hasta que adquieran un color tostado.
NOTA: Se pueden servir con miel y mantequilla fundida, o bien podéis abrirlas por la mitad y rellenarlas de mermelada o queso, etc…
Fuente: recetashalal.com