Turquía ha experimentado una disminución significativa en sus inventarios de ganado.
El ministro de Agricultura y Silvicultura de Turquía, Ibrahim Yumakli, anunció la “Hoja de ruta ganadera 2024-2028” en febrero de 2024, tras una importante disminución de los inventarios de ganado nacional. Esta escasez fue el resultado de un aumento considerable en el número de vacas hembras sacrificadas después de que los precios nacionales de la leche cruda cayeran drásticamente, según un reciente informe de la Red Mundial de Información Agrícola (GAIN) del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).
Al mismo tiempo, Turquía ha experimentado un aumento del 640% respecto al año anterior en las importaciones de ganado vivo, que se valoraron en 1.200 millones de dólares en 2023. Estas importaciones proceden principalmente de Brasil y Uruguay. Desafortunadamente, aunque se esperaba que las exportaciones de ganado vivo de Estados Unidos a Turquía registraran un año récord en 2024, tras el brote de IAAP en el ganado vacuno en Estados Unidos, Turquía ha prohibido las importaciones de ganado vivo de Estados Unidos.
Durante la presentación de la hoja de ruta, el ministro Yumakli afirmó que el objetivo del proyecto es aumentar los patrones de producción saludables y de alta calidad en el país y satisfacer las necesidades alimentarias de los 85 millones de habitantes y 57 millones de turistas de Turquía. La inflación alimentaria de Turquía es motivo de gran preocupación para el gobierno turco, ya que ha aumentado un 70,14% en los doce meses que terminaron en mayo de 2024.
Los precios de la carne también han aumentado durante la última campaña comercial hasta las 450-550 liras turcas (TK)/kg (14-17 USD/kg a junio de 2024), lo que supone un aumento del 43 % con respecto a la campaña comercial anterior. Este aumento de los precios ha afectado directamente a los consumidores, ya que los precios minoristas y de los alimentos de origen animal siguen aumentando. Yumakli señaló que el primer tema de la hoja de ruta es la “planificación de la producción animal”.
El Ministerio de Agricultura y Silvicultura ha creado un modelo regional, centrado en la producción, los costos, la capacidad y las oportunidades de comercialización, y ha priorizado la protección del agua y los recursos naturales, así como la garantía de una producción suficiente y saludable de carne roja, carne de ave, leche y huevos para mantener la seguridad alimentaria nacional. También se tomó en consideración la capacidad de producción de forrajes de calidad, que es el principal insumo para la producción animal, y las zonas de pastoreo. Además, el ministerio ampliará su modelo de producción contractual para garantizar la estabilidad de los precios y los alimentos nacionales.